Lo Que Creemos...

  • Creemos que la Biblia es la Palabra de Dios, inspirada por el Espíritu Santo, que es precisa, con gran autoridad y se aplica a nuestro diario vivir.
  • Creemos en un Dios eterno, creador de todas las cosas. Él existe en tres personas: Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo. Él es Omnipotente, Omnisciente y Omnipresente, completamente Santo y está lleno de amor.
  • Creemos que el pecado es lo que nos separa de Dios y de su propósito y plan para nuestras vidas.
  • Creemos en la Deidad de Jesucristo: su preexistencia y que nació de María mediante una concepción sobrenatural. Creemos en  el poder de Jesús de realizar milagros.
  • Creemos que el Señor Jesucristo, como Dios y hombre; es el único que puede reconciliarnos con Dios, que no tan sólo vivió una vida sin pecado y ejemplar, pero murió en la cruz por nosotros, y resucitó al tercer día para declarar victoria sobre la muerte y el pecado, y por ende entregarnos dicho poder para vencer.
  • Creemos que para recibir perdón y experimentar un “nuevo nacimiento” tenemos que arrepentirnos de nuestros pecados, creer en el Señor Jesucristo, y someternos a su voluntad para nuestras vidas.   
  • Creemos que somos salvos por fe y no por obras.   
  • Creemos en el bautismo en agua, en la Santa Cena, en la solemnidad del matrimonio, en la presentación de niños, en la imposición de manos y sanidad divina.        
  • Creemos que para vivir la vida santa y fructífera que Dios tiene para nosotros, necesitamos ser bautizados en agua y ser llenos del poder del Espíritu Santo. El Espíritu Santo nos capacita para ejercitar los dones espirituales, incluyendo el hablar en lenguas.      
  • Creemos que Dios nos ha equipado y capacitado para lograr alcanzar con éxito su plan, el cual conlleva: adoración a Él, cumplir nuestro propósito en la congregación y servir a la comunidad donde vivimos.  
  • Creemos que nuestro destino eterno, ya sea el cielo o el infierno, está determinado por nuestra respuesta al Señor Jesucristo.      
  • Creemos que el Señor Jesucristo regresará otra vez, tal y como lo prometió.